
Incandescencia y ruinas
I
Yo invoco la cabeza
más sagrada que exista
debajo de la nieve.
Mi corazón azul
canta purificado por el silencio.
II
Vándalo de pureza,
hostígame. Si hablas, yo bajaré mis labios hasta el agua salvaje.
De aquella gruta donde abrasa la frescura,
ha de surgir un rey sucio de profecías.
Oh corazón que ves
en toda oscuridad,
cuándo estaremos ciegos
en luz, cuándo hablarás,
habitante del fuego.
Oh corazón que ves
en toda oscuridad,
cuándo estaremos ciegos
en luz, cuándo hablarás,
habitante del fuego.
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